¿Se ahogan las hormigas en el agua?

Información de contexto

No es raro ver hormigas correteando cerca de fuentes de agua como charcos o baldes. Si bien estas pequeñas criaturas pueden ser bastante hábiles para cruzar finas corrientes de agua, muchas personas se preguntan qué sucede si estas hormigas se encuentran en una fuente de agua demasiado profunda. ¿Las hormigas se ahogan en el agua? La respuesta corta es sí. Las hormigas no tienen la capacidad de nadar, por lo que cuando se sumergen en agua, se hunden y se ahogan.

Estructura y hábitat de las hormigas

Como una de las especies más exitosas de este planeta, las hormigas se han adaptado a una amplia variedad de hábitats que van desde desiertos áridos hasta selvas húmedas. Si bien son capaces de sobrevivir en estos hábitats, no pueden nadar en el agua. Esto se debe a su estructura corporal, que está formada por exoesqueletos rígidos cubiertos de una sustancia cerosa. Esta capa cerosa repele el agua, lo que hace que las hormigas se hundan cuando entran al agua. Además, las hormigas carecen de estructuras de órganos respiratorios, como las branquias de los peces, por lo que no pueden absorber oxígeno mientras están sumergidas.

Adaptaciones

Ante su imposibilidad de nadar, las hormigas se han adaptado para poder cruzar fuentes de agua. Algunas especies, como las hormigas rojas, son capaces de flotar sobre el agua o unirse para formar un montón de hormigas. Las hormigas más grandes y pesadas en el fondo de esta pila tomarán la iniciativa y actuarán como un dispositivo de flotación para las otras hormigas. Esto permite que el grupo permanezca a flote hasta que lleguen a una fuente terrestre segura.

Otras adaptaciones para sobrevivir en el agua

Curiosamente, otras especies de hormigas han logrado adaptar su comportamiento para sobrevivir en el agua. Las hormigas mandíbula trampa, pertenecientes al género Odontomachus, constituyen una excepción. Esta especie puede secretar burbujas de aire alrededor de su cuerpo que son lo suficientemente fuertes como para mantenerlos a flote. Algunas especies de hormigas también pueden existir en un estado de animación suspendida cuando se sumergen en agua, lo que ralentiza su metabolismo hasta que resurgen. Además, también se sabe que algunas hormigas construyen balsas de hojas para realizar su viaje a través de fuentes de agua.

Sinreótica

Otra característica increíble de algunas especies de hormigas es la capacidad de sobrevivir en ambientes extremadamente salados. Esta capacidad se conoce como sinronía, que es donde las hormigas secretan una sustancia cerosa muy parecida a lo que hacen cuando caminan sobre superficies secas. Esta capa cerosa crea una barrera similar a una zapatilla que ayuda a las hormigas a mantenerse a flote en el agua.

Señalización de socorro

Cuando se enfrentan a sumergirse en el agua, las hormigas se ponen muy inquietas y alertas. Cuando se enfrentan a un charco de agua, un grupo de hormigas enviará señales de socorro para indicar que están en peligro de ahogarse. Una vez que haya sonado esta alarma, otras hormigas vendrán e intentarán rescatar a sus compañeras. Esto generalmente toma la forma de una estructura humana similar a una cadena que se extiende a través del agua y permite que la hormiga «perdida» cruce.

Efectos del agua sobre las hormigas

Los efectos de sumergirse en agua sobre la salud de las hormigas varían de una especie a otra. Si bien algunas especies pueden recuperarse una vez que son retiradas del agua, otras sucumben a los efectos de la falta de oxígeno o la hipotermia. Incluso si una hormiga logra sobrevivir a un encuentro con el agua, aún puede sufrir efectos a largo plazo, como daños en sus antenas o infertilidad.

Impactos del cambio climático

El cambio climático ha intensificado la frecuencia e intensidad de las inundaciones, lo que ha provocado un aumento del número de hormigas que corren peligro de ahogarse. Esto es especialmente cierto en el caso de las hormigas que colonizan áreas urbanas, ya que ya no pueden atravesar las superficies debido a los duros materiales de construcción utilizados en las ciudades. Como resultado, es posible que estas hormigas no puedan escapar de la creciente cantidad de agua en su entorno y, en última instancia, puedan ser víctimas de ahogamiento.

Hormigas en cautiverio

En cautiverio, es importante tomar precauciones adicionales al gestionar las colonias de hormigas. Las hormigas no deben alojarse en recipientes llenos de agua, ya que corren peligro de ahogarse. También se debe retirar el agua de los recipientes lo antes posible si se acumula debido a la condensación. Si un gran número de hormigas han quedado sumergidas en agua, se pueden mejorar sus condiciones secándolas y colocándolas al sol hasta que hayan resucitado por completo.

Métodos de prevención de ahogamiento

Para evitar que las hormigas se ahoguen, es importante crear charcos de agua poco profundos que sean fácilmente accesibles y visibles para las hormigas para que puedan detectarlas a tiempo y evitarlas. Para áreas con vegetación espesa o cursos de agua, se pueden crear puentes o caminos con materiales como ramitas u hojas para guiar a las hormigas. Cualquier tipo de obstáculo que impida que las hormigas se sumerjan en el agua puede ayudar a protegerlas a largo plazo.

Sitios de anidación artificiales

Para garantizar que las hormigas no se ahoguen accidentalmente al intentar alcanzar una fuente de agua, se pueden proporcionar sitios de anidación artificiales. Estos pueden construirse con materiales como arena, tierra y astillas de madera y llenarse con agua para que las hormigas puedan acceder a ellos sin riesgo de ahogarse.

Bolsillos de aire

En los casos en los que no sea posible crear sitios de anidación artificiales, se pueden crear bolsas de aire para que las utilicen las hormigas. Esto generalmente se hace creando canales o charcos de agua en los que se puede atrapar el aire y evitar que se escape. Estas bolsas de aire proporcionan fuentes accesibles de oxígeno para las hormigas, lo que les permite cruzar el agua sin ahogarse.

Deja un comentario